Hace algún tiempo Christian Mies y Marc Speier pensaron que podía ser divertido construir un modelo a radiocontrol del Antonov AN-225 Mriya, el avión en servicio de mayor envergadura del mundo y con mayor capacidad de carga.
Decidieron que 1:16 era una escala interesante. El resultado es este bicho de 5,8 metros de envergadura, 5,3 de longitud y un peso de 93,5 kilos aunque su idea original era que pesara unos 70 kilos. Está en el extremo opuesto del P-51 de radiocontrol de 3 gramos de peso. En Antonov AN-225 Mri 1:16 se pueden ver fotos y algún vídeo del proceso de construcción.
Sólo en las dos turbinas Behotec 180 que monta la inversión es de unos 6.000 euros; a ellas hay que añadirles los cuatro fans eléctricos de 90 milímetros, el resto de materiales, y montones de horas de trabajo. Pero el resultado es realmente impresionante.
No existe más que un An-225 en el mundo; fue construido para transportar los transbordadores espaciales del programa Buran soviético, lo que lo hace equivalente a los Shuttle Carrier Aircraft (SCA) de la NASA. Aunque los SCA eran Boeing 747 modificados mientras que el Mrya es un avión de nuevo diseño.
Hay un segundo Mrya cuya construcción fue reiniciada en 2009 tras varios años detenida para llevarlo al 60-70% de estar terminado. Luego volvió a detenerse la construcción, aunque se supone que desde 2016 están trabajando en terminarlo para Aerospace Industry Corporation of China.
(Vía Antonov airlines).