Concepción artística del satélite en órbita
Tal y como estaba previsto hoy se lanzó el Orbiting Carbon Observatory de la NASA a bordo de un cohete Taurus XL desde la base aérea de Vandenberg, pero el satélite nunca llegó a alcanzar la órbita terrestre, estrellándose, según estiman desde la agencia, en algún punto del océano cerca de la Antártida: NASA's Launch Of Carbon-Seeking Satellite is Unsuccessful.
Es pronto para estar seguros, pero todo parece indicar que el fallo ha sido debido a que el carenado que protegía al satélite de los efectos del aire -la parte ancha del cohete que se ve en la parte superior de la imagen de la derecha- no se desprendió en el momento indicado, con lo que el exceso de peso hizo imposible que el cohete pudiera llevarlo a la altura adecuada.
El objetivo de la misión era cartografiar los puntos de emisión y absorción del CO2 y conocer mejor cómo se desplaza este por la atmósfera.
Además, los datos obtenidos se iban a cruzar con los del GOSAT, el Observatorio de Gases de Efecto Invernadero de la Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial, para intentar obtener un modelo más preciso.
Aparte de investigar el accidente a fondo para intentar confirmar la causa del fallo en el lanzamiento, la NASA tendrá ahora que evaluar si construir un nuevo satélite con las piezas de repuesto que le quedan del montaje de este o si dejarlo estar y apuntar esta misión en la lista de fracasos definitivamente.
Anotaciones relacionadas:
- La NASA lanzará un rastreador de CO2, una descripción algo más detallada de la misión.
- Lanzado el observatorio de gases de efecto invernadero japonés, un satélite con un objetivo similar.