Aunque va directamente en contra de lo que nos sugiere la intuición la distancia de frenado de un móvil no depende de su masa sino fundamentalmente de su velocidad y del coeficiente de rozamiento entre las ruedas de este y la superficie sobre la que se mueve.
De hecho, tal y como se puede leer en Distancia de detención para un móvil, de donde he sacado las ecuaciones que aparecen abajo, depende del cuadrado de la velocidad.
Esto se puede ver al despejar la ecuación que iguala la energía cinética de un móvil, a la izquierda, con el trabajo que hay que realizar para frenarlo, a la derecha, donde m es la masa, V es la velocidad, g es la aceleración de la gravedad, µ es el coeficiente de rozamiento, y Df es la distancia de frenado:
Al despejar para hallar la distancia de frenado la masa desaparece ya que multiplica y divide al mismo tiempo, con lo que queda que:
Por eso es muy importante saber el coeficiente de rozamiento de las pistas de un aeropuerto a la hora de realizar aterrizajes seguros, aunque también es cierto que el peso de un avión sí influirá en la velocidad a la que aterrice y que además algunos disponen de reversas en los motores y spoilers en las alas para ayudar a frenar.
Para medir este coeficiente se usan vehículos especialmente adaptados o bien un remolque que porta el equipo necesario, tal y como cuentan en Medición del Coeficiente de Rozamiento.
Un equipo medidor del rozamiento de Sarsys montado en el maletero de un Saab; en este caso el depósito de agua ocupa el espacio de los asientos traseros
El procedimiento consiste básicamente en poner el coche a 96 kilómetros por hora y bajar la rueda de medición, echando agua opcionalmente si se desea obtener el parámetro para pista mojada aún cuando esta esté seca.
La medición se lleva a cabo en ambos lados de la pista y el equipo al final da los datos correspondientes a cada uno de los lados y la media de la pista.
Igual que se mide el coeficiente de rozamiento en las pistas también se puede medir en las calles de rodaje, plataformas, o cualquier otra superficie por la que tenga que rodar un avión.
Conviene, quizás, aclarar que el peso no importa a la hora de frenar siempre que esté dentro de los parámetros para los que fue diseñado el sistema de frenado; en un vehículo con sobrepeso sin duda eso será un factor porque los frenos no podrán gestionarlo adecuadamente.
De la misma manera, cualquier avión tiene especificado un peso máximo al aterrizaje para hacerlo con los márgenes de seguridad adecuados; no respetarlo puede conllevar una salida de pista o, directamente, romper el tren de aterrizaje.