Esta pasada noche a las 23:32 hora de España (UTC +2) la NASA lanzaba la sonda Lunar Reconnaissance Orbiter y su compañera la Lunar CRater Observation and Sensing Satellite (LCROSS) a bordo de un cohete Atlas V desde la plataforma de lanzamiento 41 de Cabo Cañaveral en Florida: NASA Successfully Launches Lunar Impactor.
La misión de la LRO tiene cuatro objetivos fundamentales, que son:
- Hacer un mapa topográfico de la Luna.
- Medir la radiación que se recibe en órbita lunar.
- Explorar las regiones polares de la Luna, incluyendo la posible existencia de depósitos hielo de agua en ellas.
- Tomar imágenes con una resolución máxima de 0,5 metros para ayudar a escoger posibles puntos de alunizaje para futuras misiones.
Gracias a estas últimas imágenes, por cierto, será posible ver algunos de los equipos que dejaron sobre la superficie de la Luna las misiones del programa Apolo.
La duración de la misión principal está prevista en un año, pero podría extenderse en otros cuatro años más en los que la sonda podría actuar también como relé de comunicaciones de otras misiones.
Con la LRO fue enviada también la Lunar CRater Observation and Sensing Satellite, una sonda que tiene como misión recoger datos del choque del motor que las llevará hasta la Luna choque contra la superficie de esta con la idea, una vez más, de intentar confirmar la presencia de agua de hielo en esta.
La duración de su misión, de todos modos, será extremadamente corta, ya que unos cuatro minutos después del choque del motor contra la Luna la LCROSS hará lo propio en otra zona.