Estas silenciosas pero interesantes imágenes muestran el lanzamiento desde un avión de transporte C-17 Globemaster III de ocho vehículos todoterreno Humvee, en una zona de entrenamientos militares de Carolina del Norte.
Resulta curioso ver el lanzamiento desde las diferentes posiciones de cámara: en el techo de la cabina de carga, en el suelo y también en las tomas subjetivas que hay en algunos de los vehículos, tanto frontales como traseras.
Los enormes paracaídas tienen 30 metros de diámetro y normalmente son capaces de frenar la «jaula» que sujeta el Humvee desde la velocidad de caída libre hasta unos 32 km/h (unos 8 o 9 metros por segundo). El avión de transporte previamente ha «frenado» también para sobrevolar la zona objetivo a unos 140 nudos (260 km/h) y 250 metros de altura más o menos.
Bajo las ruedas y la plataforma del coche se instalan entre 3 y 5 paneles ondulados –parecidos al cartón, pero más resistentes– capaces de absorber el impacto. Si algo va mal y la estructura choca contra el suelo a más velocidad pueden partirse uno o varios de esos paneles.
La mecánica de estos lanzamientos está muy estudiada y perfeccionada, lo cual no quita para que a veces haya «pequeños fallos»… Pero claro, cuando estamos hablando de un vehículo de casi dos toneladas y media el resultado es un…
… ¡CHOFFFF! realmente espectacular, a juzgar por la nube de polvo resultante. En la maniobra del vídeo por alguna razón además fallaron los paracaídas de tres vehículos, lo cual teniendo en cuenta que cada Humvee cuesta unos 220.000 dólares les salió por un pico.