{Esta anotación no es apta para gente con fobia a los gérmenes. Misofóbicos abstenerse.}
En Travelmath contrataron a un microbiólogo para examinar 26 muestras de 5 aeropuertos y 4 aviones y obtener un cálculo rápido de cuáles eran los lugares más sucios del avión. Entendiendo por «sucio» más exactamente «con mayor población de bacterias contagiosas». El veredicto: la bandeja-mesita en la que se sirve la comida.
El cálculo se normalizó en un valor llamado CFU («Unidades Formadores de Colonias» por pulgada cuadrada). Mientras que el más «obvio» candidato al premio, el botón del inodoro, tan solo tenía 265 CFU, la bandeja del asiento alcanzó el valor de 2155 (!) Incluso el conducto de aire acondicionado tenía más (285) mientras que el valor del cinturón de seguridad, que todo el mundo ha de toquetear, era 230.
Comparativamente, fuera de los aviones, en un teléfono móvil llevamos 27 CFU, el dinero tiene 5, en un inodoro puede haber 172 y en los juguetes de las mascotas 19 000 (por no hablar de sus utensilios/comederos, el peor sitio).
(Vía Taxi.)