Al final la meteorología se portó y el primer Boeing 747-8i, con matrícula N6067E, realizó ayer su primer vuelo de prueba, de unas cuatro horas y 45 minutos de duración.
La altura de crucero fue de 19.000 pies y la velocidad de 250 nudos, y durante el vuelo se hicieron pruebas de apagado y encendido de los motores General Electric GEnx-2B67, así como comprobaciones básicas de maniobrabilidad.
Cosas más sofisticadas quedarán para próximos vuelos, que en total sumarán más de 600 horas, aunque con la gran ventaja de que muchas de las horas acumuladas por el 747-8F, que realizó su primer vuelo hace algo más de un año, servirán para reducir las horas de vuelos de prueba necesarias para este avión, con lo que se estima que podría entrar en servicio en el último trimestre de este año.
A los mandos en este vuelo estaban los comandantes Mark Feuerstein y Paul Stemer.
Por cierto que hoy mismo Boeing ha anunciado -por enésima vez- la fecha de la primera entrega de un 787, ahora prevista para el tercer trimestre de este año: Boeing 787 Dreamliner - New First Delivery Date.