El 31 de marzo de 2017 el primer Boeing 787-10 realizaba sin problema alguno su vuelo inaugural de cara a conseguir la certificación de tipo necesaria para la entrada en servicio comercial del modelo.
Se trata de la variante más larga del 787, con 11,5 metros más de longitud que el 787-8, el «pequeño» de la familia, lo que le da mayor capacidad de pasaje y carga. Así, en una configuración estándar de dos clases puede llevar hasta 330 pasajeros, un 30% más que el 787-8, mientras que en cuanto a carga el aumento de capacidad ronda el 28 por ciento.
En cuanto a su eficiencia Boeing habla de un consumo de combustible menor en un 25 por ciento que los modelos que reemplaza (y del 10% respecto a los modelos de la competencia más eficientes) y también una reducción del 60% en los niveles de ruido.
Si todo va según lo previsto entrará en servicio en el primer semestre de 2018 con Singapore Airlines, su cliente de lanzamiento, y poco a poco con el resto de los clientes que tienen encargadas unidades de este modelo: Air Lease Corporation, All Nippon Airways, British Airways, Etihad Airways, EVA Air, GE Capital Aviation Services, KLM y United Airlines.