pregunta de Javier Redin
Los asientos de los pilotos tienen muchas más posibilidades de regulación que, por ejemplo, el asiento normal de un automóvil. Con ello, resulta mucho más difícil colocar el asiento en el punto óptimo, que, además, variará con cada piloto, igual que un conductor regula la posición de sus asiento hasta lograr una postura que, con los brazos ligeramente doblados, sus muñecas descanses sobre la parte superior del volante. En el caso de un piloto de avión, obtener la posición ideal consiste en colocar la cabeza en un punto determinado, de tal forma que se tenga el ángulo de visión óptimo hacia fuera y hacia dentro. Para encontrar ese punto se usan esas bolitas, que son tres. El «truco» consiste en alinear dos de ellas, de tal forma que la central eclipse a la otra.