Un cambio en las predicciones meteorológicas ha llevado al equipo de control de la misión a indicarle a André Borschberg que haga esperas al oeste de Japón antes de seguir adelante con su intento de alcanzar Hawaii desde China a bordo del avión eléctrico Solar Impulse 2.
Los cálculos iniciales indicaban que Borschberg tendría tiempo suficiente de alcanzar Hawaii antes de que un frente nuboso se interpusiera en su ruta, pero ahora mismo eso está en duda.
Y eso supone un problema para el intento de cruzar el Pacífico porque, por una parte, el SI2 necesita vientos de cola para poder alcanzar Hawaii dentro de tiempo previsto, y por otra, cielos despejados para recargar sus baterías durante el día de tal modo que estas puedan alimentar sus motores durante la noche.
Así que en estos momentos el equipo de SI2 está analizando cuidadosamente los datos para ver si siguen hacia Hawaii o si dan la vuelta.
El mayor problema de esto es que cuanto más se retrasen, más probabilidades tienen de que la temporada de huracanes los pille antes de cruzar el Atlántico.
Por otra parte, tras la primera noche en vuelo, los paneles solares del SI2 han recargado sin problemas las baterías del avión, con lo que este podría permanecer en vuelo indefinidamente… De no ser un avión tripulado, claro, ya que los suministros que lleva Borschberg a bordo son limitados.
La información más actualizada acerca del estado del vuelo, en Twitter vía @solarimpulse.