Si es cierto lo que dice The Daily Mail en acerca de que el piloto no podía ver el principio de la pista lo lógico es que este hubiera hecho una frustrada y se hubiera ido al aire en lugar de aterrizar tan corto que golpea con el tren una pequeña elevación por la que pasa una carretera unos cuantos metros antes de la pista.
Afortunadamente esa elevación no era muy alta y casi la libra, por lo que aunque el Transall C-160 sale rebotado y probablemente hubiera necesitado al menos una buena revisión antes de volver al servicio de no ser porque estaba siendo entregado a un museo, al final no pasa nada.
Pero desde luego a esos spotters que estban allí al lado seguro que nadie les dijo que el spotting era un deporte de riesgo :S
Aunque eso sí, el titular quizás es un «pelín» exagerado.