Según se puede leer en Space Shuttle Program Completes New Plan for Next Launch la NASA tiene un plan de actuación que le podría permitir lanzar el Discovery en la misión STS-119 el próximo mes de marzo según progrese el trabajo con las tres válvulas de presurización del depósito principal de combustible.
Para ello los técnicos de la agencia están ya desmontando dos de las tres válvulas para tomar hasta 4.000 imágenes de cada una en búsqueda de cualquier posible señal de fracturas; también se instalarán válvulas que hayan volado en menos ocasiones para minimizar las posibilidades de que alguna de ellas falle.
Por otro lado, se sigue estudiando qué podría pasar si alguna de las válvulas falla y se desprende un trozo de ellas, como ya sucedió en el lanzamiento del Endeavour en la misión STS-126 el pasado noviembre, lo que de hecho es la causa de este retraso.
Estas tres válvulas reenvían parte del hidrógeno gaseoso que va a los motores del transbordador al depósito principal de combustible para mantener este a la presión adecuada, y en el caso del Endeavour la rotura de parte de una de ellas provocó que por su línea la presión fuera mayor de la necesaria, aunque las otras dos compensaron este exceso y al final el lanzamiento no tuvo ningún problema.
También es posible que se tome la decisión de instalar algún tipo de protección o refuerzo en las líneas de presurización antes del lanzamiento para protegerlas ante el hipotético desprendimiento de algún fragmento de una válvula ya mencionado.
Será el próximo 4 de marzo cuando la agencia volverá a evaluar los avances en esta investigación para ver si entonces se lleva a cabo una comprobación prevuelo el 6 de marzo en la que se fijaría una nueva fecha de lanzamiento, que podría ser el 12 de marzo si todo va bien.
Si este se produce en esa fecha o en los dos días siguientes el retraso acumulado en el lanzamiento de la misión STS-119 no influiría en los lanzamientos de las misiones STS-125 al Hubble y de la STS-127 a la Estación Espacial Internacional, pero si se retrasa más el Discovery no podría despegar hasta abril, ya que tendría que dejar el turno al lanzamiento de la Soyuz TMA-14, previsto para el 25 de marzo, lo que a su vez retrasaría el lanzamiento de las dos misiones citadas.
Anotaciones relacionadas: