El Boeing 747-121 con número de serie 19369 y matrícula N747PA fue el primero de los entregados a Pan American, cliente de lanzamiento del modelo, aunque no fue el primero en realizar un servicio comercial, lo que le correspondió al N736PA, bautizado como Clipper Victor, el 22 de enero de 1970.
A cambio, el N747PA tuvo el dudoso honor de convertirse en el primer 747 de PanAm en sufrir un accidente el 30 de julio de 1971 cuando realizaba el vuelo 845 de la compañía, aunque afortunadamente este se saldó sólo con unos cuantos heridos y daños en el avión.
Estos fueron reparados y el avión volvió a entrar en servicio, volando con la compañía hasta 1973 con el nombre Clipper America, cuando pasó a volar con Air Zaire como N747QC.
En marzo de 1975 PanAm lo recuperó y aunque conservó su matrícula original, fue rebautizado Clipper Juan T. Trippe, en honor al fundador de la compañía.
Tras varios años más de servicio en PanAm y otras aerolíneas, fue finalmente retirado de servicio, terminando en un vertedero de aviones californiano hasta que en 2000 un matrimonio de Corea del Sur lo compró para convertirlo en este restaurante:
Pero las cosas no fueron tan bien como ellos esperaban, y en 2005 se vieron obligados a cerrar el negocio y a intentar buscar un comprador para el avión, lo que no consiguieron, con lo que finalmente, según se puede leer en Historic 747 reaches grim end in South Korea, lo que quedaba de él está siendo demolido estos días para ser vendido como chatarra:
No es que, afortunadamente, haya escasez de 747 en servicio y preservados en el mundo, pero no deja de ser una pena que un ejemplar de una cierta relevancia histórica termine así.
En España, mientras tanto, el Museo Nacional de Ciencia y Tecnología da los últimos toques al morro del B747 Lope de Vega que será una de las piezas estrella en su sede de La Coruña, mientras que el EC-DIA permanece en La Muñoza, quien sabe si a la espera de que pueda haber buenas noticias sobre su futuro.