Este impactante vídeo a cámara lenta muestra momento del lanzamiento en pruebas de un misil balístico intercontinental RS-28 Sarmat desde la base rusa desde el Cosmódromo de Plesetsk.
Este pedazo bisho no es precisamente un «emisario de paz»: transporta entre 10 y 24 ojivas termonucleares que sumadas tienen una capacidad de destrucción de unos 50 megatones (unas ~2.500 veces más que las de Hiroshima y Nagasaki, de unas decenas de kilotones). Su explosión puede ser unas tres o cuatro veces como la del evento de Tunguska. Y además de un alcance de más de 10.000 km como buen ICBM cualquier intento de defensa ante él resulta fútil.
Según cuentan todas las pruebas de momento realizadas desde diciembre han bien, así que la carrera armamentística de los asnos estúpidos parece que progresa adecuadamente hacia el fin del mundo.
Salvando las distancias, se parece a los viejos vídeos de las pruebas de lanzamiento de los misiles Polaris estadounidenses y británicos desde submarinos nucleares. ¿Quizá por el peculiar patrón de colores blanco y negro?
Como ya explicamos hace tiempo no es que los diseñadores tengan poca mano con el diseño. La razón es más de tipo práctico: los patrones blancos y negros se utilizan como marcadores de referencia para poder observar mejor la rotación y movimientos del cohete durante su lanzamiento.
Ese patrón blanco-negro al estilo ajedrezado puede verse tanto en vídeos de los cohetes Saturno V como en el RS-28 Sarmat y otros misiles, donde especialmente en los lanzamientos de prueba grabados a cámara superlenta es importante poder calcular con precisión cómo se está desplazando exactamente a cada instante.
Bonus: el vídeo del misil defensivo tierra-aire Patriot que el otro día se «dio la vuelta» en Riyad [en el vídeo, 00:40] sembrando el caos y destrucción al parecer en una zona residencial. (La ciudad estaba siendo atacada por misiles lanzados desde Yemen).
(Vía @EurekaBlog.)
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