A alguien apodado LhoghoNurbs se le ocurrió diseñar un juego de cubertería fractal a partir del diseño de una cubertería normal y corriente, tirando de Photoshop. ¿Sería práctica? El tenedor no parece tener problema; la cuchara es un poco rara y pese a la extraña forma del cuchillo… seguro que corta.
El resultado es una combinación que contiene un tenedor de Cantor, capaz de pinchar cualquier aceituna por pequeña que sea; una cuchara recurrente, donde cabe de todo y el cuchillo de Koch, con un filo de longitud infinita, en honor a la famosa curva del mismo nombre.
Como curiosidad, la cubertería también se incluye a sí misma de forma infinita, de forma recurrente, grabada muy pequeñita, muy pequeñita en el mango de los cubiertos.
(Vía Proof.)