Todos estos botones tan… ejem, distintos… son de la misma web. Mala idea.
Me gustó cómo Brad Fost plantea el inventario de interfaz de una web: una recopilación sistemática de todos los iconos, botones y elementos gráficos y textuales que se utilizan para interactuar con las páginas.
Quienes alguna vez hayan construido una web de mediana complejidad sabrán que una de las técnicas básicas que ayudan a controlar que nada falta y nada sobra es hacer un inventario completo de los contenidos. Fost menciona largas listas en Excel, que yo mismo recuerdo haber usado hace años, para ir anotando y marcando al estilo «lista de cosas por hacer» las páginas restantes; al mismo tiempo es una forma fácil de añadir notas y ver a grandes rasgos qué falta y cuáles son los niveles (áreas, secciones, etcétera) de su estructura.
Si recopilas todos los iconos y elementos de interfaz de una web el resultado puede ser como el de la imagen de arriba. Es la web de un banco. ¿Por qué es todo tan distinto? Las webs con diseño más consistente y sencillo tienen menos elementos y son todos más parecidos y consistentes, manteniendo su personalidad visual, naturalmente, su función.
