Pierre Buttin ha sentido la llamada del arte tras haber sido influido por aquellas webs con diseños brutalistas que recopila como buen documentalista Pascal Deville.
De modo que armado con un móvil y su Photoshop ha decidido brutalizar la interfaz visual de algunas de las apps más populares para móviles. El resultado se puede disfrutar [nota: es necesario ponerse gafas de sol u otro tipo de protección ocular] en Giving popular apps the brutalist treatment.
El resultado es una especie de versión artística del abandonar toda esperanza, dejando a un lado cualquier tipo de geometría agradable y elaborada, los matices de los mundos del color y la sutil belleza de la tipografía: en el brutalismo sólo se pueden usar formas primitivas como cuadrados y botones básicos, la paleta de colores mínima y las tipografías del sistema.
Esto da lugar a versiones de Gmail o Twitter completamente planas, cuadradas y chillonas, un Google Maps o un Candy Crush apropiados para arrancarse los ojos o un Tinder que parece más un cuadro de Mondrian que una app. El brutalismo es así, amigos.