Aprovechando en lanzamiento de prueba de un cohete Antares y una cápsula Cygnus simulada el pasado 21 de abril se ponían también en órbita tres CubeSats que llevaban en su interior otros tantos teléfonos móviles.
El objetivo de este experimento era demostrar la viabilidad de usar teléfonos inteligentes como sistemas de control de un satélite sencillo. Para esto Los Phonesat 1a y 1b montaban sendos HTC Nexus One, mientras que el 2 montaba un Samsung Nexus S.
Un PhoneSat durante unas pruebas de altura en un globo
Los dos primeros costaron unos 3.500 dólares cada uno, mientras que el tercero salió por unos 8.000 dólares, aunque esto es debido a que incorpora sistemas más complejos que permiten el envío de comandos desde tierra, cosa que los otros dos no aceptan.
Además de eso, aprovecharon para enviar fotos con sus cámaras, aprovechando que estaban por allí. Estas fotos fueron recogidas por el equipo de los PhoneSat y aficionados de todo el mundo, componiendo imágenes como estas, antes de su reentrada el 27 de abril.