Hace años explicamos por aquí hablando de la física del columpio autopropulsado que los giros de 360 son imposibles en los columpios convencionales (de cuerdas o cadenas) pero perfectamente posibles en los de «cables» metálicos fijos.
Este vídeo un poco jackass sería la demostración palmaria, realizada en un vetusto columpio callejero «de los de la era de Franco» – o más bien «de los de la era de Stalin», que el vídeo es ruso.
Lo encontré en Sploid, donde añaden que cuando el descerebrado de turno sigue empujando al protagonista para girar más y más rápido todavía, probablemente alcance una aceleración de 4 G. No he hecho los cálculos pero suena un poco exagerado teniendo en cuenta que en las montañas rusas más espectaculares se alcanzan 3, 4 o 5 G como mucho durante algunos instantes. Pero ahí queda la «hazaña» en cualquier caso.
Bonus: Usar Mind Heist de la banda sonora de Origen para darle el punto dramático al vídeo, compensando un poco su penosa resolución.