Aún quedan muchos detalles que pulir de aquí a que vuele el primer Ariane 6, pero los ministros del ramo han decidido ya la que será la configuración básica del Ariane 6, que tendrá como objetivo poder poner en órbita de transferencia geoestacionaria cargas de entre 3 y 6,5 toneladas: The baseline configuration of Ariane 6 selected by consensus.
Para ello usará tres motores de combustible sólido colocados lado a lado como primera etapa, otro igual como segunda etapa, y un cuarto motor, en este caso de combustible líquido, como tercera etapa.
Los motores de la primera y segunda etapas aprovecharán en la medida de lo posible la tecnología desarrollada para el Vega.
El de la tercera etapa estará basado en el del Ariane 5 ME, de Mid-life Evolution, la versión mejorada en desarrollo del Ariane 5, que podrá colocar dos satélites pesados en órbita geoestacionaria, en lugar de uno pesado y otro más pequeño como hasta ahora.
Finalmente, la cofia tendrá un diámetro de 5,4 metros, lo que dará al Ariane 6 el mismo volumen de carga que tiene el Ariane 5, aunque no llegará a las 11,5 toneladas de capacidad previstas para el Ariane 5ME.
Según cuenta la ESA los criterios principales para optar por esta configuración han sido el coste de explotación, el tiempo que tardará en estar listo y los costes de desarrollo.
En octubre de 2013 habrá una nueva reunión en la que se empezarán a estudiar ya propuestas concretas por parte de la industria para ir fabricando el nuevo lanzador.