El 30 de diciembre de 2015 la Unión Internacional de Química Pura y Aplicada confirmaba el hallazgo, y por tanto su inclusión en la tabla periódica, de cuatro nuevos elementos, elementos que ocupan los puestos 113, 115, 117 y 118 de esta.
Los cuatro nuevos elementos recibieron los nombres provisionales de ununtrio, unumpentio, ununseptio y ununoctio, con los correspondientes símbolos Uut, Uup, Uus y Uuo.
Pero tal y como se puede leer en IUPAC is naming the four new elements nihonium, moscovium, tennessine, and oganesson ya hay una propuesta para nombres definitivos.
Estos serían:
- Nihonio, con símbolo Nh, para el elemento 113, antes conocido como Uut. El nombre viene de que fue descubierto en Japón y Nihon es una de las formas en las que los japoneses se refieren a su país.
- Moscovio, con símbolo Mc, para el elemento 115. El nombre homenajea a Rusia y a la región de Moscú, donde está situado el instituto de investigación que lo descubrió.
- Tennesino, con símbolo Ts, para el elemento 117, en honor a la región de Tennessee, donde están varias instituciones que han contribuido a la investigación de elementos super pesados.
- Oganesón, con símbolo Og, para el elemento 118, en homenaje al profesor Yuri Oganesián, uno de los científicos más importantes en el campo de los elementos pesados.
Esta propuesta está abierta a revisión y sugerencias hasta el próximo 8 de noviembre, y de hecho en español puede que haya algún cambio; una vez terminado este periodo a finales de 2016 la IUPAC hará oficiales los nuevos nombres.
Estos cuatro elementos completan la séptima fila, o período, de la tabla, y por tanto completan la tabla periódica, al menos tal y como la conocemos hasta ahora.
Ahora viene la tarea de ver si, como sugiere lo que sabemos hasta ahora de los elementos, existen los períodos –filas– 8 y 9, lo que confirmaría la existencia de la tabla periódica de los elementos ampliada.
Eso sí, averiguarlo no va a ser nada fácil, ya que si los cuatro elementos que completan la séptima fila tienen una vida media de milisegundos, con la excepción del ununtrio-286, que es el isótopo más estable del elemento 113, que tiene una vida media de 20 segundos, los de las siguientes filas tendrán con toda probabilidad vidas medias aún más cortas.
Esta vida media tan corta hace que estos elementos probablemente no vayan a tener mucha utilidad práctica, pero el saber que existen cubre un hueco en nuestro conocimiento del mundo, y eso siempre mola.
Por cierto que un libro más que recomendable sobre la tabla periódica y los elementos químicos y porqué son tan importantes es Todo es cuestión de química de Deborah García Bello, toda una carta de amor a la tabla periódica.