Un estudio publicado por empleados de un par de empresas del campo de la salud y de Apple muestra algunas ideas sobre cómo los dispositivos que llevamos todo el día encima, como teléfonos y relojes inteligentes, tabletas y demás, podrían usarse en el futuro para detectar síntomas de deterioro cognitivo a partir de los datos que registran y de apps específicas. No es algo que se pueda hacer a día de hoy, pero se está analizando sí se podría hacerse en el futuro y cómo, aunque todavía no se tienen conclusiones definitivas al respecto.
La idea parece sencilla: para empezar se monitoriza toda la información posible de estos dispositivos: calidad del sueño, velocidad al teclear, número de veces que se comunican, uso y calidad del lenguaje, estado de ánimo, movimientos, etcétera. Luego se añaden otras pruebas específicas tales como cuestionarios breves acerca del estado de ánimo y pruebas cognitivas de tipo test muy sencillas. Finalmente se cruza todo de modo que tenga sentido y se corresponda con las señales de deterioro cognitivo que se conocen.
En las pruebas participaron más de 120 personas voluntarias a lo largo de 12 semanas: 31 padecían de deterioro cognitivo en distintos grados y 82 no tenían ningún deterioro conocido. Se analizaron todos los datos minuciosamente, con la idea de separar los que pueden ser indicativos de señales de un estadio temprano de la enfermedad de Alzheimer de lo que podría ser considerado debido al envejecimiento natural.
El estudio concluye que no está todavía claro si el método puede ser capaz de anticipar la aparición de síntomas claros, algo que en enfermedades como el Alzheimer es crucial para un tratamiento rápido que haga que durante un tiempo esos síntomas no empeoren, dado que todavía no se conoce un tratamiento definitivo para la enfermedad.
Se puede leer aquí:
- Developing Measures of Cognitive Impairment in the Real World from Consumer-Grade Multimodal Sensor Streams (ACM Digital Library)
La otra cuestión que surge es de tipo ético y personal, que parece salida de uno de esos dilemas filosóficos: ¿Si existiera una app que te avisara si estás desarrollando un deterioro cognitivo, querrías instalarla? ¿Y si funcionara a costa de tener que compartir tus más íntimos datos personales? Lo más importante es aclarar que para que se puedan activar esas funciones los usuarios deben autorizar previamente sobre el uso de sus datos.
(Vía MIT Tech Review.)
{Foto (CC) PXhere.com}
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