Tres CubeSAT emprenden su camino - NASA
El pasado día 4, el mismo día que se cumplían 55 años del lanzamiento del Sputnik, se lanzaron cinco CubeSAT desde la Estación Espacial Internacional usando el Small Satellite Orbital Deployer.
Se trata de un dispositivo que se carga dentro de la Estación con los satélites a lanzar y que luego se coloca en la esclusa de Kibo, el laboratorio japonés, donde el brazo robot de este lo recoge y lo coloca en posición de lanzamiento, a la espera de recibir la orden pertinente.
Aki Hoshide junto al SSOD en la esclusa de Kibo - NASA
El SSOD en el extremo del brazo robot - NASA
Este lanzador, que se probaba por primera vez, tiene la peculiaridad de que, con todas las salvedades para haber sido homologado para su uso en el espacio, es un mecanismo muy sencillo, ya que lo forman dos tubos rectangulares en los que se cargan los CubeSAT a lanzar y un mecanismo que los impulsa que es como el muelle que lanza las bolas en un pinball.
El lanzamiento con éxito de estos cinco CubeSAT usando el SSOD lo convierte en una alternativa para otros satélites similares, que pueden optar por este sistema en lugar de contratar el lanzamiento un un cohete convencional.
La capacidad máxima del SSOD es de seis CubeSAT en un solo lanzamiento, pero dado que en esta ocasión uno de los satélites lanzados era de dos unidades sólo lanzó cinco.
Raiko, el CubeSAT de dos unidades
Los cinco satélites lanzados fueron el japonés FITSAT-1, para estudiar comunicaciones ópticas desde satélites en órbita; el TechEdSat de la NASA, que estudiará el funcionamiento de módulos electrónicos de comunicaciones estándar en el espacio; el Raiko, que lleva dos cámaras y una especie de vela desplegable para controlar la actitud del satélite; el WeWish, que lleva una cámara de infrarrojos para estudios medioambientales; y el F-1 vietnamita, que lleva una cámara para observación de la Tierra y que servirá también para probar el diseño de sus sistemas de comunicaciones.
Dado que los cinco satélites están en una órbita baja y que carecen de sistemas de propulsión apenas durarán unos meses, pero al ser fabricados con componentes estándar los CubeSAT están demostrando ser una forma asequible de acceder al espacio para organizaciones que de otro modo no podrían ni planteárselo.