Por @Wicho — 17 de Diciembre de 2013
We saw it burn up from the Falklands at about 9.20pm last night. Came from the South breaking up into bits. pic.twitter.com/54DwAiTI0k
— Bill Chater (@Cheds23) noviembre 11, 2013
Fin de la sonda GOCE de la ESA
Pues tienen razón en Wired con lo que cuentan en In Memoriam: The Space Robots We Lost This Year, ya van unas cuantas sondas espaciales que este año han terminado sus misiones:
- El Landsat 5, desactivado en junio, tras 28 años de servicio observando la Tierra.
- El Jason-1, un proyecto conjunto de la NASA y el CNES, que durante 11 años midió el nivel del mar, la velocidad del viento, y la altura de las olas alrededor del mundo, desactivado también en junio.
- El GOES-12, que se pasó más de diez años vigilando la meteorología de la costa oeste de los Estados Unidos, y desactivado en agosto a causa de sucesivos fallos en su sistema de propulsión.
- El Kepler, que con dos ruedas de reacción estropeadas ya no puede mantenerse lo suficientemente estable como para seguir buscando planetas extrasolares, aunque se manejan ideas que igual podrían permitir ponerlo de nuevo en marcha.
- La Deep Impact de la NASA, la primera en tomar contacto con un cometa, y con la que se perdió el contacto en septiembre cuando iba camino del asteroide 2002GT, ya en su misión extendida.
- El Planck de la ESA, que realizó un detallado estudio de la radiación de fondo de microondas en la que podemos leer detalles del origen del universo, apagado el 23 de octubre al quedarse sin refrigerante.
- El GOCE de la ESA, que en noviembre se desintegraba en la atmósfera tras casi cuatro años haciendo el mapa más detallado de la gravedad de la Tierra.
Y se olvidan del Herschel, también de la ESA, que estudiaba los objetos más lejanos y fríos del universo en las bandas del infrarrojo lejano y submilimétricas, apagado el 17 de junio.
Eso sí, todas ellas han durado mucho más de lo originalmente previsto.