Por Nacho Palou — 4 de septiembre de 2012
El truco está en la aplicación en un patrón de nanoperforaciones en la superficie de una «lente plana ultrafina», formada por una lámina de silicio y un recubrimiento de oro de unos poco nanómetros de grosor, que cambian la dirección de la luz y la dirigen hacia al punto focal,
eliminando aberraciones ópticas tales como el efecto "ojo de pez" que producen los objetivos de gran angular así como otros defectos y distorsiones propios de de las lentes convencionales. La imagen resultante es completamente precisa y no necesita ninguna técnica correctora compleja.
Más: Flat lens offers a perfect image.
Vía DisplayBlog.