En Popular Science explican la que parece la solución definitiva a la anomalía de las sondas Pioneer, uno de los grandes problemas de la ciencia actual que se había ganado un espacio entre las 13 cosas que no encajan según las teorías científicas que conocemos hasta el momento.
Al final la famosa anomalía ha resultado ser como algunos sospechaban una cuestión relacionada con la disipación térmica de los generadores nucleares del vehículo, que lo hacían de forma asintrópica (irregular) causando con el tiempo una ligera pero reiterada fuerza que desviaba su trayectoria sobre lo previsto.
Para resolver el problema lo que han tenido que hacer los científicos ha sido ampliar el rango de datos que estaban estudiando, que pasó de 3 y 11 años a 23 y 11, tanto para las Pioneer 10 como Pioneer 11. Los nuevos datos encajaban a la perfección y se vio además que la fuerza «disminuía con el tiempo» –algo que no se había observado antes– lo cual encaja también con la teoría de que es el calor emitido por el núcleo radiactivo de plutonio-238 en la forma calculada por los ingenieros en los modelos y simulaciones.