Lanzado el 18 de abril de 2018, el observatorio espacial TESS tiene como misión encontrar planetas extrasolares. Para ello se pasará dos años observando el cielo, uno dedicado al hemisferio norte y otro al hemisferio sur con sus cuatro cámaras.
Cada una de ellas, con su telescopio asociado, cubre un área del cielo de 24 grados. La imagen que se ve arriba es la primera que han captado ya calibradas y en funcionamiento; es la primera imagen de trabajo del telescopio.
En la columna de la derecha salen los cuatro sectores de observación, cada uno de ellos correspondiente a una de las cámaras; a la izquierda se ve ampliado uno de los sectores de los cuatro en los que están divididos a su vez los campos de cada cámara. El tiempo de exposición es de 30 minutos.
A la derecha en esta imagen está la Gran Nube de Magallanes; a la izquierda está R Doradus, una estrella tan brillante que satura una columna de pixeles del detector CCD de la cámara.
Uno de los telescopios de TESS. A la izquierda, mientras lo ensamblan. A la derecha, ya listo, parasol incluido. Los telescopios y las cámaras han sido diseñados y construidos por el Laboratorio Lincoln de MIT
TESS detectará la presencia de planetas extrasolares mediante el método de los tránsitos, que consiste en medir el brillo de la luz que nos llega de cada estrella y detectar las variaciones en él que producen los planetas que la orbitan al pasar entre ella y nosotros.
Para ello TESS observa de forma continua cada una de las bandas que cubren sus cámaras durante 27 días antes de pasar a otra; en total observará en 85% del cielo. Justo a tiempo ahora que Kepler está en las ultimísimas.
La misión está en Twitter como @NASA_TESS.