Tras su lanzamiento el pasado 26 de julio el cuarto satélite medioambiental Meteosat de segunda generación, o MSG-4, está siendo probado y calibrado en órbita, aunque una vez que termine este periodo de pruebas y alcance su órbita definitiva será dejado en reposo a la espera de que sea necesario su uso.
El instrumento principal del MSG-4 es el SEVIRI, o Spinning Enhanced Visible and Infrared Imager, que es como una cámara capaz de obtener una imagen completa del globo terrestre cada 15 minutos en 12 bandas distintas, incluyendo el espectro visible, el infrarrojo, y del vapor de agua presente en la atmósfera. La resolución en la banda visible es de un kilómetro y de tres en el infrarrojo.
La imagen de arriba es la primera capturada por el SEVIRI el 4 de agosto a las 10:00 UTC, y es la mejor prueba de que todo funciona correctamente a bordo.
Está previsto que la citada fase de pruebas y calibración termine a finales de año, y a partir de entonces el MSG-4 quedará a la espera de que sea necesario ponerlo en servicio, momento en el que será rebautizado como Meteosat 11.
Los 8, 9 y 10 están en servicio sobre Europa y África, mientras que el Meteosat-7 lo está sobre el océano Índico.
Como el resto de los satélites Meteosat, su misión será observar nuestro planeta y obtener imágenes y datos que serán incorporados en los diferentes modelos de predicción del tiempo que usan los meteorólogos.
El MSG-4, como buen satélite moderno que es, anda por Twitter como @MSG4_satellite.
Aparcarlo en órbita hace que la estructura del satélite no esté sometida a las cargas debidas a su propio peso, ya que en órbita geoestacionaria está en caída libre y es como si no pesara nada, y además, al estar en el espacio, no se corre el peligro de que ninguno de sus instrumentos pueda sufrir ningún tipo de contaminación que degradaría sus capacidades.
Por otra parte, queda listo para entrar en servicio inmediatamente cuando sea necesario sin necesidad de esperar a que haya un cohete disponible para su lanzamiento ni tener que pasar el periodo de pruebas, así que todo son ventajas.
El MSG-4 es el último de la segunda generación; el próximo satélite Meteosat que sea lanzado pertenecerá ya a la tercera generación, más avanzada y con más capacidades e instrumentos.