En una de las conferencias de TED titulada Why Things Sync Up?, magistralmente planteada por Steven Strogatz, se mostró este interesante vídeo donde se aprecia con claridad el problema que tuvo el famoso Puente del Milenio de Londres el mismo día de su inauguración: un montón de personas caminan por el puente colgante y se «sincronizan» fortuitamente, causando vibraciones en la estructura. A su vez esas vibraciones hacen que la gente se sincronice más todavía, aumentando el efecto. El balanceo alcanzó niveles obviamente preocupantes y el puente se cerró.
En la conferencia se explica el porqué de este inesperado efecto mediante el uso de un simulador: un pequeño movimiento inicial hace que la gente tienda a sincronizarse «de forma obligada» para poder caminar sin caerse. Eso refuerza el movimiento y aumenta el problema, aparentemente sin fin. Aquí se publicó un resumen del tema: Explicando por qué el puente del milenio se tambaleó.
Este problema de resonancia mecánica se conoce desde hace mucho tiempo; Nacho lo revisó el año pasado al hablar de uno de los más famosos casos: la caída del puente colgante de Tacoma Narrows (espectacular vídeo aquel). Lo curioso es que a día de hoy sigue sorprendiendo a los ingenieros. Hasta los Cazadores de Mitos lo investigaron: sus veredictos sobre la leyenda de si unos miltares podrían derribar un puente por «marchar al paso» variaron desde que «no era posible» hasta que «era tan posible como improbable». En algunos puentes, como se puede imaginar, podría depender únicamente de sus defectos de diseño.
Actualización: Carlos nos hizo llegar una gran aportación, un enlace a un artículo muy completo sobre la resonancia que fue publicado en Curioso pero Inútil. Allí también se explica que la caída del puente de Tacoma, aunque suele presentar hasta en los libros de texto como un ejemplo de problema de resonancia, fue en realidad debido a «una sobrecompensación de las vibraciones torsionales del puente bajo una fuerza constante» (en inglés: fluttering).
Más: Alex nos recordó el impactante vídeo Cómo sincronizar cinco metrónomos, una gran demostración del poder de la resonancia y un experimento que el propio Steven Strogatz realizó durante su charla en TED.
Y más todavía: El puente y la samba, otro impactante vídeo esta vez en la Autovía de la Plata, A-66, sobre el río Tajo, por efecto del viento. Como nos comenta Carlos Alberto «se tuvieron que soldar unos deflectores al puente en movimiento para que el aire fluctuase de manera diferente y no hiciera vibrar al puente.» Más detalles sobre lo que sucedió en El puente del Tajo en la A-66 que nos envió Claudio. Otro caso histórico fue el del puente de Angers en Francia como nos recordó gredan.