Souare Sekouba, miembro del equipo de ensayos clínicos, toma la temperatura a uno de los voluntarios usando un termómetro infrarrojo - OMS
Seguimos sin tener una cura para el Ébola, pero los resultados de las vacunas experimentales que se están probando en África siguen siendo esperanzadores.
Muy esperanzadores.
Tal y como se puede leer en World on the verge of an effective Ebola vaccine los resultados del ensayo clínico de fase III de la vacuna VSV-EBOV llevada a cabo en Guinea indican que esta es extremadamente efectiva: hasta ahora ha demostrado un 100% de protección en los individuos que han participado en el ensayo clínico.
Este ensayo se estaba haciendo mediante el método de vacunación en anillo, que consiste en vacunar a aquellas personas que han estado en contacto con una persona infectada, creando una especie de anillo protector de persona vacunadas a su alrededor que impide la transmisión de la enfermedad.
Hasta la fecha 4 000 contactos cercanos de casi 100 enfermos de Ébola han participado en el ensayo de forma voluntaria, sólo que en la mitad de los casos, escogidos al azar, se aplicaba la vacuna inmediatamente después de la identificación del paciente y en la otra mitad a las tres semanas, para poder comparar los resultados.
Pero desde el pasado 26 de julio, y vistos los primeros resultados, se aplica ya a todo el mundo de forma inmediata.
De hecho es muy probable que en ensayo clínico se amplíe para incluir niños de entre 13 y 17 años e incluso también de entre 6 y 12 dado lo segura que parece ser la vacuna.
Además de la estrategia de vacunación en anillo la VSV-EBOV se estaba aplicando también a trabajadores que están en la primera línea de la lucha contra la enfermedad, pues a diario están en contacto con pacientes que la sufren.
Ahora queda analizar la influencia de esta vacuna en cuanto a su efectividad a la hora de aumentar la inmunidad de rebaño frente al Ébola.
Pero ciertamente es una noticia muy esperanzadora.