Philae emprende su camino visto por la cámara Osiris de Rosetta - ESA/Rosetta/MPS for OSIRIS Team MPS/UPD/LAM/IAA/SSO/INTA/UPM/DASP/IDA
Hoy a las 10:03 se recibía en el Centro Europeo de Operaciones Espaciales de la Agencia Espacial Europea en Darmstadt la señal que confirma que el aterrizador Philae se ha separado con éxito de la sonda Rosetta, quien durante los últimos diez años y 6500 millones de kilómetros la ha llevado rumbo a su destino.
El contacto de Philae con la superficie del núcleo del cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko está previsto a partir de las 16:22:20, hora central de Europa, aunque no hay certeza del momento del aterrizaje ya que Philae sigue una trayectoria de caída libre que hace que el punto de contacto y el momento no se puedan determinar con total exactitud.
Maniobra de separación
Si aterrizar en el núcleo de 67P ya era complicado a priori el fallo del propulsor de gas que va montado en la parte superior de Philae hace las cosas aún un poco más difíciles.
De hecho anoche no estaba nada claro que la Agencia Espacial Europea fuera a decidir seguir adelante con el intento de aterrizaje cuando quedó claro que, al menos según los datos recibidos desde Philae, no se había producido la necesaria presurización de los conductos de gas del propulsor.
Estos debían haberse presurizado tras la rotura de un sello de cera que los aislaba del depósito de gas, algo de lo que se encargan dos percutores distintos.
Pero por lo visto dos intentos con cada uno de ellos no han servido para nada.
Tras consultar con el fabricante parece ser que hay más bien poco que se pueda hacer al respecto, así que la ESA ha decidido seguir adelante con el intento de aterrizaje.
Así que tendrán que ser los arpones que lleva bajo su cuerpo y los taladros que van en los extremos de sus tres patas los que se encarguen de fijar Philae a la superficie de 67P.
Debido a la distancia a la que se encuentra 67P de la Tierra no recibiremos confirmación del aterrizaje como poco hasta las 17:02:20.
Si lo de Curiosity fueron siete minutos de terror cuando llegó a Marte, esto serán siete horas de comerse las uñas hasta los codos.
