Deuteranopia o ceguera para el color verde
Protanopia o ceguera para el color rojo
Tritanopia o ceguera para el color azu
A raíz de la anotación acerca de que las mujeres ven más colores que los hombres (sí, y tiene una base biológica) estuve hablando con un lector acerca de cómo ven el mundo los que sufren de algún tipo de ceguera de color y he encontrado un par de simuladores en línea que permiten hacerte una idea de cómo ven el mundo estas personas; es más complicado que abrir una imagen en Photoshop y ocultar el canal RGB correspondiente.
Las tres imágenes de arriba están generadas con Vischeck, que permite subir un archivo y procesarlo para simular deuteranopia, protanopia y tritanopia; también tiene un simulador para ver una web filtrada con los ojos de una persona con ceguera de color, aunque no funciona.
Coblis
Coblis — Color Blindness Simulator, por su parte, es bastante más práctico porque, aparte de simular más tipos de ceguera de colores, no exige subir el archivo cada vez que quieres ver otra simulación.
Mientras miraba estas cosas recordé una vez, hace ya bastantes años, cuando estaba de compras con un amigo buscando un regalo para una amiga común. Le enseñé un peluche blanco y él me contestó que si no fuera tan rosita molaría más.
Nuestros sentidos nos permiten interpretar el mundo, pero casi nunca somos conscientes de que no todo el mundo lo interpreta igual, que ha variaciones.
Y es que a ver, por ejemplo, se aprende:
A la derecha una simulación de como vería esta imagen un bebé de 3 meses poniéndola a 30 centímetros de sus ojos – TinyEyes
Lo que, a su vez, me recuerda el problema de Molyneux, del que habla José Ramón Alonso en El escritor que no sabía leer:
Si un ciego de nacimiento que adquiere la vista a edad adulta y mira un cubo y una esfera, figuras geométricas que antes sabía reconocer y nombrar gracias al tacto, ¿reconocería con la mirada lo que ya sabía reconocer con las manos? ¿El conocimiento del espacio tiene entonces carácter empírico o es a priori?
TL;DR: no, no las reconocería; hay que aprender a relacionar el tacto con la vista, aunque se aprende rápido.
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