Poco después de entrar en órbita la tripulación del Endeavour se puso a configurarlo para su estancia en el espacio.
Para ello abrieron las compuertas de la bodega de carga y activaron los radiadores allí instalados, lo que permite disipar el calor que se genera en su interior y controlar la temperatura. También desplegaron la antena de banda Ku, que permite comunicaciones de banda ancha entre la nave y el control de la misión en tierra.
Nick Patrick y Kay Hire procedieron por su parte a activar el brazo robot de la nave y comprobar su funcionamiento para luego realizar una inspección de la bodega para ver que todo está en su sitio y que durante el despegue nada se ha desplazado ni ha ocurrido ningún percance.
El brazo robot será utilizado también durante el segundo día de la misión para tomar imágenes y medidas del escudo de protección térmica de la nave con el Orbiter Boom Sensor System.
Los datos obtenidos con el OBSS junto con las imágenes del tanque externo que los astronautas del Endeavour tomaron tras su separación de la nave y las que tome la tripulación de la Estación Espacial Internacional de la parte inferior del transbordador antes de que este atraque allí serán analizadas en tierra por miembros especializados del equipo en busca de cualquier daño que pudiera suponer un problema para la vuelta a tierra de este.
Fuente: STS-130 MCC Status Report #01.
- Endeavour/STS-130: Lanzamiento, el último nocturno del programa.