Desde ayer el Endeavour está en la plataforma de lanzamiento 39A del Centro Espacial Kennedy, donde los técnicos de la NASA ya trabajan en prepararlo para su última misión, la STS-134.
EL Endeavour en la plataforma de lanzamiento - NASA/Jack Pfaller. [Original a 2.000×3.000 pixeles, 4,7 MB]
Además de llevar más suministros y repuestos a la Estación Espacial Interncaional, el objetivo principal de esta misión es instalar en esta el Espectrómetro Magnético Alfa, un instrumento diseñado para estudiar varias clases de materia exótica mediante la medición de rayos cósmicos.
La idea es que esto ayude a los científicos a entender mejor la formación del universo y a detectar materia oscura y antimateria.
Este instrumento, aunque ya estaba construido, se había quedado sin hueco en la planificación de las misiones de los transbordadores inicialmente aprobada por la NASA tras el desastre del Columbia, aunque al final en junio de 2008 la administración Bush ordenó añadir una misión más precisamente para poder ponerlo en órbita.
Esta misión tenía que haber sido lanzada antes de la STS-133, recién terminada, pero al final se tomó la decisión de modificar el espectrómetro cambiando un imán superconductor por otro normal, lo que si bien lo hará menos sensible permitirá que dure más, ya que el superconductor necesitaba de un sistema de refrigeración que se habría quedado sin consumibles en un par de años o tres.
El AMS durante su ensamblado y pruebas en Ginebra - NASA/JSC.
Esto hizo que hubiera que retrasar varios meses el lanzamiento, que ahora mismo está programado para el 20 de abril de este año a la 1:48 del 20 de abril, hora de España (UTC +1), aunque antes, entre el 29 de marzo y el 1 de abril, se llevará a cabo el Terminal Countdown Demonstration Test, un ensayo general de este.
Será la última misión para el Endeavour, que después de ella terminará expuesto en alguno de los centros que han expresado interés -y tienen el dinero necesario- para hacerse con él.
