Según Ford en el año 2022 el 90 por ciento de los coches vendidos ese año incorporarán algún tipo de sistema de control de voz que irán más allá de los meros comandos predefinidos. Actualmente su sistema de vehículo conectado, Syn-3, ya permite controlar por voz algunos aspectos a través de Apple CarPlay y de Android Auto. En un futuro próximo Syn-3 añadirá la opción de utilizar también el asistente por voz de Amazon, Alexa.
“El siguiente paso para los coches del futuro podría ser registrar pequeños cambios en nuestra expresión facial, así como modulaciones e inflexiones en nuestra voz, facilitando la experiencia de conducción de los consumidores”, dicen en Ford.
Esta capacidad del vehículo para detectar el estado de ánimo del conductor ofrece la posibilidad de desarrollar un “coche empático que podría contarte un chiste para animarte, ofrecerte consejo cuando lo necesites, recordarte los cumpleaños y mantenerte alerta en un largo viaje; también aprenderá qué canciones nos gusta escuchar cuando estamos estresados y en qué momentos preferimos disfrutar del silencio. La iluminación interior también podría variar para ajustarse a nuestro estado de ánimo.”
Fotografía: Ford (más o menos).