5 Very Good Reasons to Punch a Dolphin in the Mouth (And Other Useful Guides). Matthew Inman. Andrews McMeel Publishing (2011).
Este pequeño librito es una recopilación de las tiras cómicas de The Oatmeal, un clásico de Internet que hemos recomendado alguna vez por aquí. Hay tanto material publicado en los últimos años que el contenido parece más bien una selección de lo más divertido, polémico y entretenido que ha publicado el autor. Entre mis favoritas: Cómo hacer un infierno de un diseño web y Preferiría que me dieran una patada en los testículos antes que llamar al servicio técnico. También hay una minibiografía de Nikola Tesla, que parece original para el libro, porque no la he encontrado en su web.
Se da la curiosidad de que Matthew Inman, el creador de todas estas hilarantes historietas, fue diseñador web y trabajó en una agencia durante unos cuantos años. Quienes estén metidos en el tema de diseñar para Internet apreciarán esto.
Puedes llegar a reírte mucho con este libro, pero... Hay dos peros: el primero, que algunas de las historias están para mi gusto demasiado pasadas de rosca, lo cual teniendo en cuenta la cantidad de gatos, velocirraptores y osos asesinos que aparecen en sus páginas en las más extrañas situaciones es estar muy pasado de rosca... La otra, más de tipo técnico: la edición para Kindle está bien, pero algunas viñetas están a demasiada baja resolución y resultan difíciles de leer.
El precio del libro son unos 8 o 9 dólares; al cambio son menos de 6 euros en edición Kindle. Un precio más que razonable que es prácticamente más bien un donativo para el autor que un gasto para el que lo compra. Así que se puede considerar que si durante todos estos años te has reído con sus historias, comprarle su libro es una buena forma de agradecimiento, echando unos euros al «bote».
¿Y ese título? ¿Qué tienen de malo los entrañables delfines? Simplemente, es otra ida de olla simpática. Entre esas cinco razones poderosas para pegarle de puñetazos a los delfines en el morro está esta: A cualquier bicho que sonría tan a menudo hay que recordarle que el mundo es un lugar oscuro y cruel. Léase con un :-)
