Según un reciente estudio un alto porcentaje de los datos científicos recogidos en trabajos de todo tipo está perdido, principalmente porque se guardaron en formatos que hoy no se pueden recuperar: disquetes ilegibles, archivos de papel que se han perdido o deteriorado, ausencia de copias de seguridad… Además de eso los datos de contacto de los autores cambian cada año, de modo que al 40 por ciento del grupo sobre el que se realizó el estudio ni se le pudo contactar (y el 80% de los emails de 1991 a 1995 «rebotó») – situación que empeora un 17% con cada año que pasa. El resumen es que tras intentar conseguir los datos de base de unos 500 trabajos los que estudiaron el tema fracasaron el 80% de la veces, logrando algo menos del 20% de respuestas.
Dada la importancia de los datos tomados como base para cualquier estudio científico de cara a poder comprobar y reproducir sus conclusiones esto se considera una gran pérdida para la ciencia. La recomendación: guardarlo todo y hacerlo público en algún sitio aunque no forme parte del trabajo resumido que se publica en las revistas. [Fuente: The Availability of Research Data Declines Rapidly with Article Age vía The Atlantic.]