Por @Alvy — 19 de marzo de 2009
Algunos animales son capaces de dormir primero con una mitad de su cerebro y luego con la otra mitad permaneciendo de ese modo alerta en su entorno de forma continuada –incluso con un ojo abierto y el otro cerrado– con la ventaja de que se procuran a la vez del necesario descanso regenerativo. Esto se ha observado en algunos pájaros, delfines, focas, largartos y manatíes. [Fuente: Unihemispheric slow-wave sleep en Wikipedia.]