Dicen que este montaje contiene las mejores imágenes del New York City Drone Film Festival, uno de los eventos para los amantes de la cinematografía y los drones. Todas las escenas están grabadas con drones, aunque como es evidente también tienen cierto trabajo de postproducción: recorte, ajustes de color, montaje… Todo para conseguir mini‑películas de unos pocos minutos realmente espectaculares y efectistas.
Eso sí: que nadie olvide que estos trabajos se realizan con equipos altamente profesionales, no con drones de 50 euros. Las cámaras son muchas veces equipos 4K montados sobre drones profesionales que cuestan miles de euros. En otras ocasiones –esas espectaculares imágenes vertiginosas como las que se ven a partir de 01:42– requieren ensayo y error y literalmente estampar y reventar pequeños drones durante las pruebas de alta velocidad.
Los trabajos completos pueden verse en el canal del festival, que está lleno de pequeñas joyitas.
(Vía Petapixel.)