Por Nacho Palou — 7 de diciembre de 2009

Logo de la campaña de Foro Nuclear "Tu energía puede mejorar el planeta: las centrales nucleares no emiten CO2".
Conicidiendo con la celebración de la Cumbre del Clima de Copenhague (del 7 al 18 de diciembre), Foro Nuclear iniciará un campaña informativa "para concienciar a la sociedad de la importancia de combatir el cambio climático y transmitir que la electricidad que se produce en las centrales nucleares no contamina el medio ambiente."

El Foro quien enfatizar cinco puntos claves en favor de la energía nuclear,

  1. Las centrales nucleares son parte de la solución. No generan gases ni partículas contaminantes a la atmósfera.
  2. La nuclear es la única fuente capaz de producir grandes cantidades de electricidad sin contaminar la atmósfera.
  3. Los ocho reactores nucleares que funcionan en España evitan la emisión anual de 40 millones de toneladas de CO2, equivalentes a las emisiones de más de la mitad del parque automovilístico español.
  4. Las emisiones de CO2 en España están un 35% por encima del compromiso adquirido en el Protocolo de Kioto y sin las nucleares esta cifra estaría por encima del 50%.
  5. La operación a largo plazo de los reactores actuales es una primera solución a la necesaria construcción de nuevas centrales para alcanzar un suministro de electricidad limpio y competitivo.

En este punto creo que es conveniente matizar y recordar que, aunque es cierto que las centrales nucleares no emiten CO2 directamente durante la producción de electricidad, sí existen esas emisiones en el ciclo completo de generación: desde la extracción del uranio que sirve como combustible pasando por el proceso de enriquecimiento del uranio, la construcción de la planta y la manipulación de los desechos contaminantes, por citar los más significativos.

El año pasado la consultora Öko-Institut calculó para las centrales nucleares europeas una media de 34 gramos de CO2 emitidos por cada kWh generado. En España, en 2006, las centrales nucleares generaron un total de 60.126 GWhe, menos del 20 por ciento del total.

Por tanto no es que con ellas no tengan que ver las emisiones de CO2 como podría interpretarse, aunque es cierto que en ese sentido (emisiones de CO2) es una cifra significativamente menor que los 1.000 gramos por kWh de una central térmica de carbón y los 120 gramos por kWh de una central solar-fotovoltaica.

También hay que considerar que hay investigaciones que consideran que el vapor de agua actúa como un "potenciador" para los gases considerados causantes del efecto invernadero (como el CO2) y que las centrales nucleares generan miles de kilos de residuos radiactivos al año tanto de alta actividad (combustible gastado) como, sobre todo, de baja actividad, otros residuos, escombros, terrenos, etc.

Además, al ritmo de consumo actual, se calcula que las reservas de uranio conocidas durarán unos 85 años. Luego probablemente tocará reutilizar lo que actualmente se considera combustible gastado, alternativa que ahora resulta más costoso que tirar de cantera.

La única alternativa limpia a la energía nuclear son las de origen eólico e hidráulico, con unos 20 gramos por kWh producido.

Por tanto, ningún método de generación está libre de emisiones de CO2, pero en todo caso sería la hidráulica la que se podría considerar la única capaz de producir grandes cantidades de electricidad sin contaminar la atmósfera (si es de eso de lo que hablamos), sobre todo en relación a las emisiones.

Las centrales hidráulicas más potentes -aunque son una minoría- son hasta dos y tres veces más potentes que la central nuclear más potente.

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