Josef Aschbacher, el director general de la Agencia Espacial Europea (ESA) acaba de confirmarlo: el primer lanzamiento del nuevo cohete Ariane 6 se retrasa al menos hasta el último trimestre de 2023. Con suerte.
Con suerte porque para ello en el primer trimestre del año tienen que haberse dado tres hitos. A saber: la prueba de encendido con éxito de la etapa superior; el arranque de las pruebas reales en el espaciopuerto de Kourou (el vídeo de arriba es con un Ariane 6 de prueba); y que haya arrancado la certificación del sistema de lanzamiento (cohete, sistemas de Tierra, etc).
La primera vez que mencionamos el Ariane 6 en esta casa allá por 2017 se suponía que iba a hacer su vuelo inaugural entre finales de 2020 y mediados de 2021. Luego, ya en 2022, se hablaba de un primer lanzamiento en a principios de 2023.
Así que tal y como están avanzando (poco) las cosas, estoy dispuesto a apostar por la Ley de Berger:
Si se prevé que un cohete debute en el cuarto trimestre de un año natural y faltan seis o más meses para ese trimestre, el lanzamiento se retrasará.
El Ariane 6 es el sustituto del Ariane 5, que tiene previsto un lanzamiento para el 14 de diciembre de 2022 y otros dos más en 2023 antes de ser retirado; se complementa con el Vega C, el lanzador para cargas pequeñas de la agencia. Los dos cohetes tienen contratados ahora mismo 29 y 7 lanzamientos respectivamente. El caso del Ariane 6 es curioso porque en un 75% son lanzamientos comerciales, algo en lo que el proyecto Kuiper de Amazon le ha dado un importante empujón.
En la rueda de prensa también se hablo del buen resultado del estreno del Vega C, la versión mejorada del Vega; y de la propuesta de un Vega E con un 20% más de capacidad de carga a un 20% menos de coste. Y también de la propuesta de un Ariane 6 mejorado con un 20% más de capacidad a órbita baja terrestre. Aunque las dos propuestas tienen que ser aún aprobadas por el consejo de ministros del ramo.
El cohete está en Twitter como @Ariane6.