Por @Wicho — 12 de septiembre de 2019

El HTV-8 en la plataforma / Trevor Mahlmann
El HTV-8 en la plataforma / Trevor Mahlmann

Un incendio detectado en la plataforma de lanzamiento unas tres horas y media antes de la hora prevista de lanzamiento obligó a posponer el lanzamiento del carguero espacial japonés HTV-8 a última hora de la tarde del 10 de agosto de 2019.

El incendio no parece haber afectado al cohete H-2B que tenía que llevar a cabo el lanzamiento ni a la cápsula de carga en sí aunque ahora habrá que determinar el origen del fuego y ver cuando se puede volver a intentar llevarlo a cabo. En principio se hablaba de unos pocos días pero si la cosa se prolonga habrá que revisar la carga de la cápsula, aunque esta puede aguantar más o menos un mes.

Los vehículos de transferencia H-II o HTV y sus lanzamientos son la contribución de la Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial (JAXA) para cumplir con su cuota de participación en la Estación Espacial Internacional. Hasta la fecha han sido lanzados siete, que en cuanto están en órbita, y siguiendo la costumbre de la JAXA, reciben un nombre. En el caso de los HTV el nombre escogido es Kounotori, que significa cigüeña en japonés.

Corte esquemático de un H-II en configuración mixta - NASA
Corte esquemático de un HTV - NASA

Los cargueros Kounotori son los que tienen la escotilla de mayor tamaño de todos los vehículos que llevar suministros a la EEI como las cápsulas de carga Cygnus, Dragon y Progress, así que a bordo de ellos se envían las cargas más voluminosas. De todas formas en esta misión no lleva nada especialmente grande entre las 3,4 toneladas de suministros que van en su compartimento presurizado que incluyen materiales para experimentos, tres CubeSat, y piezas de repuesto para la Estación.

Sin embargo en el compartimento no presurizado van seis baterías de iones de litio para sustituir las de níquel-hidrógeno del sistema eléctrico de la EEI que pesan 1,9 toneladas y que tendrán que ser instaladas durante varios paseos espaciales. La sustitución de las baterías empezó con las que llevó el Kounotori 6, siguió con las del 7, y terminará con las del 9. La idea es que al final se hayan reemplazado todas las baterías de la EEI por unidades nuevas y más eficientes.

Pero por ahora toca esperar a que Mitsubishi Heavy Industries, la empresa que fabrica el cohete H-2B y que se encarga de su lanzamiento, identifique el origen del problema, que parece estar en el sistema de suministro de combustible, lo repare, y vea cuando se puede lanzar de nuevo.

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