Lanzada sin problemas la cápsula «de rescate» Soyuz MS-23 rumbo a la Estación Espacial Internacional
Esta pasada noche Roscosmos ponía en órbita sin problemas la cápsula tripulada Soyuz MS-23. Sólo que en esta ocasión ha sido lanzada sin tripulación porque es la cápsula «de rescate» para Sergey Prokopyev, Dmitri Petelin y Frank Rubio, la tripulación de la Soyuz MS-22, cápsula que ha sido declarada no apta para volar tripulada salvo en caso de emergencia tras haber perdido su refrigerante en diciembre de 2022. A cambio de no ir tripulada lleva a bordo 429 kilos de carga útil para la Estación Espacial Internacional (EEI) y su tripulación.
Está previsto que la Soyuz MS-23 atraque de forma automática en la EEI el domingo 26 a las 2:01, hora peninsular española (UTC +1). La duración de su misión está prevista en 215 días, de modo que sus tres tripulantes no volverán a tierra hasta septiembre de 2023. De esta forma establecerán, aunque sea por accidente, un nuevo récord de permanencia a bordo de la EEI.
Claro que visto que en menos de dos meses tanto la Soyuz MS-22 como la Progress MS-21 perdieron sus circuitos de refrigeración de forma muy similar hay un cierto nerviosismo acerca de cómo se va a comportar la Soyuz MS-23, pues los dos modelos de cápsula comparten muchos sistemas, entre ellos el de refrigeración.
El agujero por el que se produjo la fuga en la Soyuz MS-22 y los restos anaranjados de refrigerante – NASA/Roscosmos
Aunque también servirá de canario en la mina la cápsula de carga Progress MS-22, que lleva atracada a la Estación desde el 11 de febrero, justo desde unas horas antes de que fallara el sistema de refrigeración de la Progress MS-21.
En cualquier caso en cuanto la Soyuz MS-23 esté atracada en la Estación una de las primeras tareas que serán llevadas a cabo será transferir a ella los asientos de Prokopyev, Petelin y Rubio. El de Rubio ahora mismo está sujeto con cinchas en la Crew Dragon Endeavour; los de Prokopyev y Petelin aún están en la Soyuz MS-22 or si tuvieran que evacuar en ella, aunque nadie tiene muy claro cómo les iría. Y mejor no tener que comprobarlo.
Quienes por ahora se han quedado sin asiento son Oleg Kononenko y Nikolái Chub de Roscosmos y Loral O’Hara de la NASA, que formaban la tripulación de la Soyuz MS-23. Si no se tuercen las cosas –y no se da ninguna otra fuga de refrigerante– tendrán que esperar al 15 de septiembre para despegar rumbo a la EEI a bordo de la Soyuz MS-24.
Mientras tanto la NASA prepara el lanzamiento de la misión Crew 6, previsto para el lunes 27. En ella viajarán Stephen Bowen y Warren Hoburg de la NASA, el astronauta emiratí Sultan Al Neyadi y Andrey Fedyaev de Roscosmos, quienes sustituirán a la tripulación de la Crew 5.