Impresión artística de la sonda camino de vuelta – CNSA
No ha habido ninguna confirmación oficial al respecto pero observaciones de radio y mediante telescopios por parte de aficionados han confirmado que la sonda china Chang'e 6 ya viene rumbo a la Tierra con muestras del lado oculto de la Luna.
El aterrizaje de la cápsula en Mongolia con las muestras está previsto para entre las 7:41 y las 8:11, hora peninsular española (UTC +2) del martes 25 de junio.
Será la primera vez que tengamos muestras del lado oculto de la Luna para analizar. Muestras que, además, vienen de la Cuenca Aitken, cerca del polo sur, que es una zona donde por todo lo que sabemos están los materiales más antiguos presentes sobre la superficie de nuestro satélite.
La Lunar Reconnaissance Orbiter de la NASA fotografió hace unos días el aterrizador de la misión:
Our Lunar Reconnaissance Orbiter spotted China’s Chang’e 6 lander on the rim of an eroded, 50-meter crater within the Moon’s Apollo basin. Chang’e 6 landed on the far side of the Moon on June 1st and LRO captured the image of the lander on June 7. https://t.co/d3Mmi2ad3D pic.twitter.com/YhKuwzS7VE
— NASA Moon (@NASAMoon) June 14, 2024
Si todo termina bien será la segunda vez que China traiga muestras de la Luna a la Tierra; ya lo hizo en diciembre de 2020 con la misión Chang'e 5, aunque en ese caso eran del lado visible. Pero fue una misión que sirvió de ensayo para la actual, que de hecho utiliza el mismo hardware –salvo el rover que le hizo la foto sobre la superficie de la luna–. Ha sido también la segunda vez que China aterriza en la cara oculta de la Luna tras la misión Chang'e 4
El aterrizador sobre la superficie de la Luna fotografiado por el rover que llevaba acoplado a uno de sus laterales. Se aprecia perfectamente el brazo robot extendido hacia la parte izquierda de la imagen. Y si te fijas un poco, la bandera china que hay cerca de la unión del brazo con el cuerpo del aterrizador – CLEP
Eso sí, fue necesaria la colaboración del satélite Queqiao-2, que en órbita alrededor de la Luna hizo de relé de comunicaciones para que el control de la misión pudiera mantener el contacto con ella. Igual que el satélite Queqiao apoyó a la Chang'e 4.