El Soyuz-STB con una etapa superior Fregat que tenía que encargarse del lanzamiento de la primera tanda de satélites de OneWeb cumplió a la perfección con su misión e insertó los seis satélites en la orbita inicial prevista con una precisión de 300 metros. Así que se encuentran en una órbita polar circular de 1.000 kilómetros, aunque en las próximas semanas irán subiendo por sus propios medios hasta alcanzar los 1.200 kilómetros.
El objetivo de OneWeb es lanzar una constelación de satélites que ofrecerán acceso a Internet de alta velocidad y baja latencia –como si tuvieras fibra, dicen– a cualquier lugar del mundo, incluyendo embarcaciones y aeronaves pero especialmente aquellos sitios a los que no llegan las infraestructuras de telecomunicaciones. Para ello planea lanzar 650 satélites en una primera etapa aunque el objetivo es ir aumentando el número de satélites en órbita según aumente la demanda.
Impresión artística de un satélite OneWeb en órbita
Pero para ello tendrá no sólo que conseguir poner en marcha la producción en masa de estos satélites sino que además tendrá que conseguirlo a un coste que no se aleje demasiado de las estimaciones iniciales, algo que no está nada claro que esté logrando. De hecho el lanzamiento inicial estaba previsto para seis satélites de la tanda inicial de 10 que iba a construir Airbus en Toulouse aunque al final sólo seis estuvieron listos a tiempo, con lo que su peso tuvo que ser suplido por masas inertes.
Estos lanzamientos están contratados con Arianespace, que en principio iba a usar cohetes Soyuz para ello, y con Virgin Space, que usará el LauncherOne. Pero tras el lanzamiento inicial Stephane Israel, el director de Arianespace, anunció que han firmado un acuerdo con OneWeb para al menos un lanzamiento en 2020 en un Ariane 62 –la versión del Ariane 6 con dos propulsores laterales– que de hecho será el primero de esta variante del cohete y opciones para otros dos lanzamientos.
Claro que todos estos lanzamientos futuros dependen de que a OneWeb le vayan saliendo las cuentas, aunque en principio aseguran que tienen prácticamente comprometida casi toda la capacidad de la primera fase de despliegue de la red, de ahí el que hayan anunciado ya que van a aumentar el número de satélites de la constelación.