En 2131 cuando llegó Rama estábamos preparados y el comandante Norton y su tripulación de la Endeavour fueron a explorarla. En 2017 cuando llegó ’Oumuamua nos pilló con el culo al aire y lo único que hemos podido hacer ha sido escudriñarlo con todo tipo de telescopios. Pero en principio nunca podremos acercarnos a él.
Aunque según cuenta Daniel Marín en Una sonda espacial para estudiar el objeto interestelar ʻOumuamua hay ideas no precisamente descabelladas que permitirían que una sonda pudiera alcanzarlo de aquí a entre cinco y treinta años. Pero para eso habría que lanzarla dentro de entre cinco y diez años y conseguir que abandone el sistema solar a velocidades de entre 33 y 76 km/s.
Es prácticamente seguro que no pasará, entre otras cosas porque necesitamos un cohete enorme tipo el Space Launch System de la NASA, que aún no está listo y porque costaría un montón de dinero y consumiría un montón de recursos.
Pero visto el resultado del sobrevuelo de Plutón por parte de la New Horizons, ¿quién sabe lo que podríamos aprender de un sobrevuelo de ’Oumuamua, un objeto que, no lo olvidemos, viene de fuera de nuestro sistema solar?