Robobo es una base móvil sobre la que se puede colocar un teléfono inteligente Android –o, en el futuro, un iPhone– que se comunica con ella mediante Bluetooth y se convierte en su «cerebro» y sus sentidos.
La idea es usar los sensores y la cámara del móvil e incluso sus micrófonos como sensores y el procesador del móvil como el cerebro para avanzar en la enseñanza de cómo programar robots autónomos. Para ello se puede programar usando Scratch o el ROS, el Robot Operating System. La pantalla del móvil se convierte en la cara y la piel del robot.
El equipo responsable de este proyecto está coordinado por profesores universitarios especializados en robótica autónoma, ingeniería mecánica e informática que han querido implementar con Robobo lo que consideran la herramienta robótica adecuada para empezar a trabajar en la robótica autónoma, independientemente de los conocimientos de los usuarios.
Robobo incluye varios tutoriales para que arrancar con su uso sea sencillo al tiempo que van avanzando poco a poco para sacarle cada vez más partido.
Lleva dos años en desarrollo y ahora está buscando financiación colectiva para lanzar el proceso de fabricación de la versión base final y para desarrollar la versión app de iOS , y para la creación de nuevos proyectos de ejemplo y unidades didácticas STEAM.
El proyecto está en Twitter como @RoboboProject.