Estas psicodélicas y coloridas gafas de cartón pueden parecer un poco pasadas de moda, pero su utilidad va más allá de la parte estética: con sólo hacerse un selfie permiten detectar la ictericia o «exceso de bilirrubina» en la sangre, algo que está asociado con enfermedades como el cáncer de páncreas, la cirrosis y otras enfermedades del hígado, el bazo y la vesícula.
El hecho de que las gafas de colores se puedan imprimir o conseguir de forma muy barata, combinadas con que la app funciona en cualquier teléfono inteligente con el que sólo hay que hacerse un selfie son las claves de su utilidad. Normalmente la ictericia se detecta con análisis de sangre y otras pruebas más «invasivas». Según dicen sus creadores, de la Universidad de Washington, en un estudio con 70 personas una simple foto con la app «acertó» en el 90% de las pruebas.
¿Cómo funciona? Cuando el nivel de bilirrubina es más alto de lo normal uno de los primeros síntomas es que el blanco de los ojos (y también la piel) adquiere un característico y visible tono amarillento. La app, llamada BiliScreen, simplemente toma una foto de los ojos. Calibrada con los colores de las gafas es capaz de detectar esas pequeñas variaciones de color – pero lo bueno es que lo hace mucho antes de lo que pueda detectar una persona a simple vista, que es cuando suele ser demasiado tarde, a veces sin remedio.
Aunque todavía esté en fase de pruebas parece una interesante alternativa para el diagnóstico rápido y barato, especialmente en lugares en los que no sea fácil realizar pruebas de otro tipo o simplemente como diagnóstico preventivo en versión «baja tecnología». Hay más información en el trabajo original: BiliScreen: Smartphone-Based Scleral Jaundice Monitoring [PDF].