El de la foto es un prototipo operativo de teléfono móvil con sistema operativo Android y procesador Intel. En su última versión de este procesador, de apellido Medfield, el último de los vástagos Atom de Intel parece capaz de competir con los procesadores ARM ahora comunes en dispositivos móviles como smartphones y tablets.
Estos prototipos ya se mencionaron cuando se anunció la nueva plataforma en mayo de este año. Technology Review ha tenido ocasión de probar ambos (móvil y tablet) con sistema operativo Android 4.0 y parece que las impresiones son buenas. Respecto al tablet dicen que «resultó notablemente más agradable de usar que la generación de tablets basados en la abandonada versión Android Honeycomb».
Medfield se ha optimizado para Android Honeycomb y también para Ice Cream Sandwich. Su inmediato antecesor era el procesador utilizado en netbooks como Nokia Booklet 3G, por ejemplo.
Medfield, a diferencia de otros procesadores Intel, se asemeja a los procesadores ARM en cuestiones de bajo consumo de energía y arquitectura "todo en uno" o SoC (System-on-a-Chip) que integra en un único chip o procesador los distintos módulos (o parte de ellos: tres en este caso) que componen un ordenador.
Intel no aparece mencionado cuando se habla de los principales fabricantes de procesadores para tablets y teléfonos móviles, pero esto podría cambiar el año que viene ahora que «Intel tiene por fin un procesador que puede igualar e incluso superar a los actuales chips usados en móviles» que además «han sido específicamente diseñados para acelerar el funcionamiento de aplicaciones Android y la navegación web».