Con una idea original extraída de Hervir un Oso, de Jonathan Millán y Miguel Noguera, en Mediavida hicieron hace tiempo una genial reflexión sobre los desplazamientos y paradojas temporales en la popular serie de televisión Cuéntame, que titularon Cuéntame cómo pasó a la velocidad de la luz
El asunto se basa en que cuando comenzó a emitirse la serie en 2001 estaba ambientada en 1968; pero siete años después (en 2008) la serie había avanzado nueve años (1977), produciendo un curioso efecto de dilatación temporal. Según esto, puede calcularse que en 2232 –con actores virtuales, suponemos– la serie estará ambientada en el mismo año: 2232. Y a los Alcántara del futuro les sucederán otras cosas más extrañas todavía, como que sus series alcanzarían una especie de velocidad infinita.
(¡Gracias, Kroaton The Joker!)